Tú eres hija del arco iris y novia del fuego...
Tú, sabes tratar con sutileza, los hilos del cuerpo.
Sueles moverte, por impulsos e instintos, pasando
a ser esclava de tus propios nervios.
Tienes la facultad, de saber retozar, de conquistar
las almas e invadir los cuerpos.
Soplas las nubes instaladas en las cabezas, y en
las olas del deseo.
¡Eres como moneda de cambio que viene y va!!
Tan pronto eres pradera fértil, tan pronto árido
desierto.
Sabes muy bien, guardar en tu mochila, los amores
y los cuentos.
¡Sin tu existencia-estoy convencido- que no tendría
razón la vida, pues se vería huérfana de amor!!.
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