Necesitamos gente que nos miren a los ojos cuando hablamos. Que sepan escuchar nuestros lamentos, con cierta paciencia, a pesar de que no nos comprendan, pero que respeten nuestros sentimientos.
Necesitamos de gente, que vengan a luchar a nuestro lado, para defender causas lógicas sin apenas ser llamdos...
Alguien lo bastante amigo, para decirnos las verdades que no queremos oir, aun sabiendo que pueden sentarnos mal.
Por eso, en este mundo de indiferentes, necesitamos de gente que crea en esa cosa misteriosa, desacreditada y casi imposible: ¡La amistad!!.
Que se obstine en ser leal, simple y justo. Que no se marche si algún día pierdemos nuestro oro.
Necesitamos de amigos, que reciban con gratitud nuestro auxilio y nuestra mano extendida. Está claro que no podemos elegir a quienes nos trajeron al mundo, pero si elegir una amistad. Con una amistad verdadera, la vida se torna más simple, más rica y bella.
No hay comentarios:
Publicar un comentario