Son muchas las personas que se dan perfecta cuenta, de la rotura
del tinterés de tanto pasear por el, y de poner en tela de juicio,
sonrisas mostradas al borde de la pasión, de tanto jugar al escondite
con verdades que pintan cierta falsedad...
Contemplo el cielo azul, a pesar de intuir que el aire huele a tormenta
y distancia insalvable.
Hace ya bastante tiempo, que prefiero la verdad sin componendas,
y los caminos conocidos por haberlos transitado. Los pendientes
de ser reocrridos, seguro estoy, que están llenos de adversidades
pero a pesar de ello, hay que hacerlo, por ser el método existente
para redimirlos.
¡Amigos míos, os diré que mientras tengamos vida, vendrán
nuevas primaveras!!
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