Si estás acostumbrada a ver lo que hace la gente en las noches
oscuras, aprende a escuchar, te servirá de complemento. De no
ser así, no temas, en tus sueños, podrás descansar en unos
brazos por los que sientas cierta predilección.
Es muy gratificante, descansar mientras contemplas como
caen esos finos hilos de lluvia. A la luz del mediodía, aparecen
multitud de nubes blancas y grises movidas por la brisa, formando
un collar de fantasía.
Resulta muy agradable, poder escuchar un poema que nos
hable de las palpitaciones del alma, de ese modo tu corazón
mecerá a las mariposas para que canten como jilgueros en tu
hombro todos los días del año.
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