En todos los espejos-amigos mios-, existe cierta crueldad,algún que otro gozo,decepción, y una semejanza ambigua que nos convierte, en otro tipo de persona, brindándonos la oporturtunidad de sentirnos reconciliados..
En su brillante y pulida superficie, se refleja la vanidad, el deseo, y esas ganas de sentirnos juez mudo, ausente, en posesión de una balanza inservible.
En el, podemos apreciar alguna que otra lágrima desechada, y una sonrisa incipiente, recién nacida...
Tan solo desaparece con prontitud, el vaho reflejo del aliento, que acompaña nuestras palabras pronunciadas cerca de su acristalada superficie.
¡La pobreza consiste en sentirse pobre!!
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