EL SILENCIO.

 

Calla la vida, ante el carnaval de risas contínuas, con la intención de vestir de fiesta los corazones resentidos!!.

Luces, que deciden hacer guiños a los árboles, sin apenas savia, que tan solo intentan seguir viviendo a contrapelo, obligados a soportar esa carencia tan necesaria para subsistir..

¡Alcohol, para afrontar falsos jubilos?, para el olvido?, los recuerdos?, quizás, para ahogar esos besos, que se han ido quedando vacíos, en medio de una ambigüedad algo lamentable..

Paliamos ausencias, retomando viejos monigotes hechos de arena cálida, mientras las gaviotas del puerto, deciden escuchar esas voces ténues, y los ojos, contemplan las olas tardías e incesantes, romper en la fina arena de la playa.

¡Cuantas noches,reclinadas en la distancia, he tenido que soportar por tu ausencia!!