Desde aquel lamentable día, que decidiste marcharte,
las flores de mi jardín, perdieron su aroma,
y color intenso..
¡Incluso el sol, se acuesta antes de lo acostumbrado!.
La tibieza del alma, se encoge de pena..
¡Dime sirena del alma, en que misterioso mar, has arrojado
mi sosiego!!.
Desde aquel preciso momento, todo es distinto,
incluso los relojes del hogar, han dejado de marcar
las horas..
Todo es tormentoso,hasta el amanecer, ha decidido
seguir acostado.
¿Por qué las alegrías antes saladas, se vuelven insípidas hoy?
Pienso, que la vida es una tómbola, donde
la suerte, nos juega malas pasadas.
¿Será la lluvia, diferente en los sueños?
¡Sin conocer la sombra, no valoraríamos la importancia de la luz!!
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