Los creativos no se estancan instalándose en ahondar en una idea
hasta sus límites; en lugar de eso, apuesta más por la agilidad y una
visión de conjunto. " La creatividad es como un truco de magia".
Los creativos, trabajan con la cabeza, los magos con las manos.
Por consiguiente hay que tener la cabeza tan ágil como las manos de
los magos.
El creativo, debe estar siempre dispuesto a aprender cosas, sin
renunciar a nada, debe saber mucho de poco y poco de mucho.
No profundiza en el mar del conocimiento, eso le permite tener
conceptos que unir, transformar, y usar a su favor, generando algo
nuevo, original, sorprendente y llamativo...
Una característica suya, es la capacidad de captar los pequeños
detalles, ya que a menudo revelan ideas.
Así como Newton alumbró la ley de la gravedad, al ver caer la
manzana, las observaciones cotidianas son la mejor escuela para abrir
nuevas vías al pensamiento.
Una persona despierta y curiosa, debe entender el día a día, como
algo cambiante y cambiable,y asumir su condición de mago, para sacar
conejos de la chistera cotidiana.
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