Calla la vida,carnaval de risas contínuas, con la intención de
vestir de fiesta, los corazones resentidos...
Luces, que deciden hacer guiños a los árboles, sin apenas savia,
que intentan seguir viviendo a contrapelo.
Alcohol, para afrontar falsos júbilos, para olvidar los recuerdos,
y para ahogar esos besos, que se han quedado vacíos.
He tenido que paliar ausencias, retomando viejos monigotes,
hechos en la arena cálida de la playa, mientras las gaviotas
de mi puerto, deciden escuchar mi ténue voz, al propio tiempo
que mis ojos, contemplan esas olas cadenciosas...
Debido a tu ausencia, me he visto obligado a soportar, muchas
noches reclinadas en la distancia.
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