El gemido de la nada, en ocasiones, se convierte-sin desearlo-, en un sonido constante que machaca sin remilgos nuestra mente, a modo de advertencia para recordarnos nuestro vacío.
Los anhelos, son a veces, como una paloma sin alas, que intenta levantar el vuelo..
Juntos, siempre juntos, esa era tu letanía...¡Cuantos recuerdos se lleva el viento!!.
Tenemos las manos vacías de promesas, pero ávidas de alcanzar nuevos sueños y esperanzas dormidas...eso es tan cierto, como lo es, que el sauce no puede vivir alejado del agua que lo nutre.
¿Puede disiparse el aire para evitar ser inhalado?.
¿Puede acaso el río, cambiar su curso natural? o de lo contrario estará obligado a proseguir su camino para desembocar en el mar..
Existe un cielo azul,un sol que nos calienta y alumbra,y la tierra sigue girando en su danza perenne...La armonía es vital para que todo funcione!!
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