Reconozcamos, que algunos pensamientos terminan
alejándose, para evitar sentirse olvidados.
Todos, -o la inmensa mayoría de nosotros- somos
conscientes que la temeridad, nos obliga a eludir
responsabilidades, a pesar de ser inadmisible...
Disponer o disfrutar de una buena compañía, es
importante, pues nos ayuda a disfrutar de un
mejor equilibrio emocional.
A simple vista ,parece estar todo dicho, lo que
sucede es que en el interior de la apariencia,
menguan los deseos,y las ilusiones, gestando ciertas
actitudes inconscientes, dimanantes de la propia
conciencia.En esos concretos momentos, todo está
en plena quietud, pero el movimiento sigue aferrado
a la fuga, destapando ese espacio ocupado en la
memoria, con la finalidad de encontrar excusas
y pretextos, en ocasiones inventados, hallando
motivos para ello...
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