El amor, es como un aguacate madurado por los rayos
del sol de poniente...es semejante, al silencio del
amanecer en el alma.
Es similar, a la mirada tierna y cálida, salida de los ojos
del niño de escasos meses, dispensada desde su
cuna de amor.
El amor, es la verdad y la mentira en justa unión,
para lograr soportar algún que otro dolor, que la
vida se encarga de aportar sin apenas solicitarlo.
El amor en ocasiones, es lágrima que se une
al río de la vida, para desembocar más tarde en el
mar de la pasión.
Sentimientos unidos por eslabones de oro, cuando
es verdadero careciendo de otros intereses.
Es en definitiva, una sensación de bienestar, que
dimana de la unión de dos seres, que están en
posesión de los mismos sentimientos, logrando
que palpiten al unísono sus corazones.
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