El aroma a rosa y verdad, me traslada a un terreno nuevo, invitándome a penetrar en el, sin ningún tipo de condiciones...
Existen días -que sin quererlo- nos vemos obligados a pensar si será cierto eso de la existencia, pues entendemos que si así fuera, no dudaría en estar a nuestro lado como un fiel amigo.
En el fondo de nuestra alma, tenemos un inmenso mar de silencio..
La vejez, incide en el tiempo de nuestra dicha, y esto ocurre cuando el ser vivo que llevamos dentro desiste en seguir adelante, es entonces cuando tan solo queda el ser como tal, y su alma alterada.
¡Las amistades cuando aparece esta situación, casi no tienen cara!!
Cuando nace una buena melodía y se interpreta como debe ser, siguiendo los pasos concretos dados en su composición, la luna se muestra alegre y decide perfumarse con olor a menta fresca, invitando a su inseparable amiga la noche, a mostrarse misteriosa y llena de embrujo.
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