Esta noche ya no quedan farolas alumbrando la calle, espero que cuando abra del todo el nuevo día, pueda volver a contemplar esos balcones floridos haciendo alarde a la nueva primavera.Quiero volver a sentir nuevas emociones, olvidando esas heridas causadas por la presencia de esos puertos donde se blancean las pequeñas embarcaciones ancladas a la espera de su partida.
Ensimismado estoy contemplando las pequeñas barcas de pesca, y el vuelo incesante de multitud de gaviotas que permenecen a la espera de su retorno con la esperanza puesta en ver saciado su apetito con algunas piezas desechadas para su comercio.
Por otra parte, intentaré llenar el vacio que tengo en mi alma, dejando caer semillas adonando el camino de regreso y verlo lleno de color y alegría, antes de que se fugue el tiempo..¡Ahora, los luceros se quedarán sin puerto!!, las nubes sin alas, y los silencios sin consuelo!!!
No anhelo terminar suspirando en el trinar de los recuerdos, ni arrastrar esos besos perdidos en el silencio!!!
Es bueno de vez en cuando, escuchar las voces que emanan de las heridas del alma, pues si no llegan a reconfortar, al menos, nos hace sentirnos más fuerte ante las adversidades...
Hay horas, que permanecen escritas en el cielo..también las palabras lo intentan, por esa razón debemos dominarlas..
Es necesario, vigilar las horas, sobre todo, cuendo el destino avanza buscando la frontera entre el día y la noche!!
Todo tiene su parte de importancia en la vida, incluso, el saber escuchar el leve sonido que emiten las plantas, al llegar el nuevo día...
omprendo y entiendo que la noche desea morir oara darle el merecido descanso a las estrellas y a la luna que alumbra los caminos, exaltando los sentidos, y preparándolos para amparar los grandes amores...
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