domingo, 28 de abril de 2013

Déjame decirte

 
Déjame decirte como se arrugan los besos de no darlos..
Como se marcha la vida a borbotones, mientras el corazón se resiste reforzando sus sístoles y diástoles luchando por la mera existencia.
¡Guerrero, batallador, quiere sentirse impregnado con aire de victoria!!
Nos resulta en ocasiones significativo, el comprobar como las horas retumban mientras permanecen asomadas al balcón del futuro..
Acuné mi tiempo, y también me enfrenté a la nueva primavera- que por cierto ha llegado un tanto cansada-mientras, intento que no me asusten esas largas madrugadas vacías de contenido; pues huelen a fracaso asfixia y pesadumbre.
Deseo que al despuntar la mañana, las farolas de mi calle dejen de alumbrar sus adoquines, y la ciudad recobre el trasiego acostumbrado de un día cualquiera. 

1 comentario:

  1. Como siempre, tus pensamientos están impregnados de sensibilidad. Me gustó leerte.
    Besos.

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