viernes, 4 de diciembre de 2015

ERROR Y TERROR


Nuestro miedo a equivocarnos se traduce, a menudo,
en miedo a decidir. Si no decidimos, no fallamos. Y si
no fallamos, no nos podremos hacer reproches ni nos
sentiremos culpables. Resultado: parálisis.
Al esquivar los errores, además, renunciamos a nuestro
maestro. En las equivocaciones subyace una fuente
inagotable de sabiduría.La ciencia avanza gracias a la
"prueba y error" y lo mismo sucede en cada vida humana.
"Sin error no se avanza.¿Quién ha aprendido a montar en
bicicleta sin caerse?. Por eso, las personas mayores que
no saben ir en bicicleta les resulta más difícil que aprendan,
porque tienen demasiado miedo a caerse. Debemos volver
a aprender, como cuando eramos niños. Crecer es aprender,
aprender es equivocarse".
Dado que, desgraciadamente, el error nos produce un
sentimiento de culpa, preferimos que otros escojan por
nosotros, antes que correr el riesgo de equivocarnos.
Esta actitud nos limita y frena nuestro crecimiento como
personas, pues acabamos diluyendo nuestra libertad
dentro de un grupo en el que no tengamos que tomar
decisiones.

No hay comentarios:

Publicar un comentario