jueves, 28 de junio de 2012

REALIDAD


Son muchos los momentos,al cabo del día o la noche, mediante los cuales, nos sentimos -en cierto modo-, anclado en nuestros sueños..
Nos establecemos, en la arena limpia de nuestros profundos sentimientos, intentando adentrarnos en ellos, con la esperanza de alcanzarlos, más pronto que tarde.
¡Enajenados, quisieramos estar!, para liberarnos de tanta desventura, con la finalidad de proseguir caminando, con paso firme, por los senderos de la vida.
Entiendo que ya es hora de ver adornada la tarde, con la presencia de una dulce y seductora mirada abierta al infinito...
Debemos hacer todo lo posible, para llenar el vacío existente en nuestra alma, que se encuentra deseosa de atenciones.
Hay que volver a disfrutar de las pequeñas cosas, como puede ser el observar, esos saltos cortos y repetidos de un gorrión de rama en rama.El contemplar, como se deslizan las gotas del rocío, por los pétalos de las rosas, al abrir el nuevo día, despertando la mañana
Disfrutar con cada día de sol,con cada día de lluvia, con los maravillosos paisajes en primavera, llenos de luz y colorido.






1 comentario:

  1. Hay que disfrutar de todos los momentos,
    cada día es un regalo,
    un abrazo

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